Reseña de Muse en Guadalajara

Hay ocasiones en que tras salir de una película/evento/concierto no puedes más que tener una sonrisa en el rostro… ayer me sucedió eso con Muse.

Yo conozco a Muse desde hace más o menos  6 años, específicamente la primera canción que les escuché fue “In Your World” cuando 102.7 aun transmitía rock, llegué a mi casa y conseguí unas cuantas rolas en el KaZaa (aush!), poco a poco me empezó a traumar hasta que se convirtió en uno de mis grupos favoritos (como lo pueden ver en mis gráficos en last.fm).

Ayer fue un espectáculo de estridencia, el audio, los guitarrazos, el bajeo, la batería, el piano (oh si, el piano!) las voces, todo era en extremo estridente, pero de un modo tal que no molestaba en lo absoluto, por un lado es bien sabido que el Auditorio Telmex tiene una excelente acústica, pero por otro lado he de felicitar a los ingenieros de audio de Muse quienes hicieron un excelente trabajo. Pero como les comentaba nos mostraron que saber hacer ruido, y del bueno, abrieron con Map of the Problematique, la canción que en lo personal más me gusta de su última producción, se me hizo bueno que abrieran con ella puesto que dio pié a que poco a poco subieran el nivel de ruido en cada una de las canciones.

Posteriormente siguieron con Supermassive Black Hole la cual fue cantada por casi todos los que acudieron al evento, en lo particular no es una canción que me guste mucho, pero la forma en que la interpretaron poniéndole una cantidad absurda de energía  sin que con ello perdiera las características de la canción hizo que sonara excelente.

Después vino Deadstar donde los guitarrazos se dejaron venir con todo, además la acompañaron con un sonido venido de un sintetizador que le daba un toque muy bueno a la rola, yo para ese momento estaba ya realmente emocionado cuando de repente Matthew se acercó al piano y empezó a interpretar el ya tan conocido intro de Newborn, en ese momento fue la locura en el lugar, todos la cantaba a todo pulmón, todos brincaban, todos la disfrutaban, una interpretación que nunca olvidaré, por cierto, he de decir que Matthew es un virtuoso en la lira, la verdad, todos son unas pistolas en su instrumento como lo demostraron Dominic y Christopher en una sesión de improvisación de bajo y batería que uff, otra cosa.

Podría hablar de cada una de las canciones, de cómo me acabé los pulmones en Butterflies and Hurricanes y City of Delusion, de cómo se me enchinaba la piel con cada nota tocada en el piano en Space Dementia y Feeling Good, de los sublime de las guitarra y el bajo en Hysteira, Time Is Running Out y Stockholm Syndrome, de cómo todos cantaron hasta casi igualar el volumen de las bocinas en Starlight, de lo bello de las luces de todos los asistentes en Soldiers Poem, de las imágenes que proyectaban en Invincible y como se plasmaban las letras de dicha canción en la mente de los presentes, de la absoluta estridencia en Plug In Baby (que dicho sea de paso como me gusta esa canción) y de cómo fue un sublime cierre de concierto con Knights of Cydonia.

Podría escribirle un párrafo a cada una de las canciones para decir lo fregón del concierto, pero no lo haré, solo diré que debieron estar ahí para verlo, para escucharlo, para sentirlo… si, para sentirlo.