El otro dÃa en la tarde tuvimos una reunión con un cliente en un Starbucks, especÃficamente en el que se encuentra en plaza Unicenter, para aquellos que no son de guadalajara les puedo decir que dicha plaza está ubicada en uno de los puntos más snobs de toda la ciudad (junto con Andares, Puerta de Hierro), es una mini plaza en la cuel se encuentran un par de negocios, un Superama (la versión snob de Walmart), unas Krispy Kreme (donas por las cuales puedes ver en horas pico filas de 25 o 30 carros en el drive thru [llegando incluso a obstruir parte de avenida patria]) y un Starbucks.
Llegamos en la camioneta de Sybelle, nos estacionamos y nos dirigimos hacia dicho establecimiento, un par de pasos fueron lo suficiente para darnos cuenta de lo que poco a poco aumenta en esta ciudad, vehÃculos BMW manejados por niños de 16 años, sonido a todo volumen y niñas que parecen más mujeres que otra cosa.
Niños que no tienen idea de lo que es la vida (y no es que yo lo sepa… aun) y sin embargo creen que han aprendido el valor de las cosas porque pueden manejar un vehiculo mejor que el 70% de los que se encuentran en la ciudad, que creen que se sienten pudientes porque sus padres les dieron dinero para que pudieran comprarles sus FrapeMochaBlancoConCarameloVenti a las niñas que dÃa a dÃa se reafirman a ellas mismas la falacia bajo la cual fueron educadas, que con solo verse bonitas todo les caerá en bandeja de plata.
Primero pensé que me estresaban, porque fué el primer sentimiento en mi al ver como actuaban, como hablaban, como pretendÃan… como pretendÃan, pero después lo pensé y no es eso, me dan pena, me da pena que a su edad no aprovechen lo que su edad les permite, todos soñamos con ser grandes, pero por lo menos en mi generación no era más que eso, un sueño, ellos, como juniors no solo lo toman como un sueño, sino que en cierto modo pretenden que lo son con lo cual matan lo que todos después más queremos recuperar, nuestra inocencia, inocencia que no solo yo sino muchos añoramos.